CONEXIÓN CON EL CIELO - Turquesa/T. Africana-Citrino-Apatita
La Turquesa trae paz de corazón, mente y alma. No por coincidencia es la piedra que los indios norteamericanos usan para sus joyas y bolsas medicinales durante cientos de años, siendo ellos algunos de los mensajeros de la nueva era para la paz en el mundo. Es una piedra que cuando la observas fijamente y en meditación, se experimenta una paz profundamente personal. Cuando la paz que sientes en tus meditaciones impregne todas las áreas de tu consciencia y de tu vida física, tendrás el verdadero sentido del potencial sanador de esta piedra. La Turquesa es la expresión física serena del propósito y la energía de tu alma cuando no hay bloqueos ni impedimentos. Trabajar con ella por un tiempo, traerá "la paz que sobrepasa todo entendimiento" desde el reino de las ideas a tu experiencia de la vida diaria.
La Turquesa Africana ayuda a profundizar en nuestros sentimientos y emociones. Es una piedra ideal para sanar todas esas viejas heridas del pasado que no somos capaces de olvidar o dejar atrás. Cuando nuestro pasado está demasiado presente en nuestra vida y nos impide vivir plenamente.
El Citrino es La piedra de la prosperidad, se dice que son “pedazos de sol”, la materialización al interior de la tierra de los rayos solares y por esto se le atribuye un gran poder de manifestación de energía creativa y da vitalidad a nuestros cuerpos sutiles. Este cristal actúa como magnetizador que atrae la buena suerte en los negocios y en el trabajo; se usa cuando se está pasando por dificultades económicas. También es excelente para terapias de sanación revisando emociones guardadas para liberarlas y alegrar la vida. Es un cristal que eleva la autoestima, la alegría de vivir y ser quien se es, aclara los pensamientos y energiza el sistema nervioso ofreciéndote positivismo, tranquilidad y capacidad de acción, fortalece la fuerza de voluntad y la capacidad de resolución.